Patatas Bravas
Puede parecer que hacer unas buenas Patatas Bravas no tenga ningún misterio, pero sí, debemos tener en cuenta un par de truquitos para que nos salgan estupendas – cremosas por dentro y crujientes por fuera. Pues, os cuento mi receta de patatas bravas, las pataticas quedan tan riquísimas que nunca sobre nada, ni una sola patata, ni una cucharadita de exquisita salsa brava.
Ingredientes
Raciones:2
- 1 kg patatas
- aceite para freír
- sal
- salsa brava:
- 3 dientes de ajo
- 2 o 3 pimientas de cayena
- 1 cucharada de pimentón dulce
- 1/2 cucharada de harina
- 1 chorrito de vinagre
- 1 taza de tomate triturado
- 1 cucharadita de azúcar
- 50 ml aceite de oliva suave
- sal
- salsa Tabasco (opcional)
Cómo hacer patatas bravas
- Escogemos 6-7 patatas de tamaño pequeño o mediano. Tendremos en cuenta que cantidad por persona es de 250 a 300 grammos. También, para no quedarnos cortos, hay que tener en cuenta que al freír las patatas se reducen mucho.
- Pelamos y cortamos las patatas en cascos.
- Cuando el aceite de freidora esté caliente metemos las patatas. Al principio las freímos en aceite suave (a unos 120C°) para que se confiten y se queden blanditas por dentro.
- Cuando las patatas estén casi hechas ponemos la temperatura más alta (a unos 170C°) para que se queden crujientes y doradas por fuera.
- Mientras las patatas están en freidora, preparamos la salsa picante que es imprescindible para las patatas bravas. Limpiamos de cascara 3 dientes de ajo, picamos los ajos.
- Los doramos en aceite unos segundos. Cuando el ajo empiece a coger color añadimos la cayena. ¡Ojo! No pongáis muchas, más vale poner dos o como mucho tres cayenas.
- Quitamos la sarten del fuego. Añadimos pimentón y harina. Removemos todo bien para evitar los grumos y para que no se queme.
- Sin dejar de remover echamos el tomate triturado y volvemos a poner al fuego lento.
- Añadimos la sal, vinagre, un poco de azúcar para corregir la acidez del tomate. Dejamos cocer unos minutos para que reduzca un poco.
- Rectificamos de sal si lo necesita. Si la salsa os parece poco picante se puede añadir dos o tres gotas de tabasco. Retiramos la salsa del fuego. Trituramos la salsa, pero personalmente a mí me gusta la salsa tal cual, con trocitos de ajo.
- Una vez que las patatas estén hechas por dentro y doradas por fuera las retiramos del aceite, escurrimos bien.
- Las patatas bravas recién fritas colocaremos en una fuente, sazonamos.
- Por encima ponemos la salsa picante. Servimos de inmediato acompañadas con dos salseras: una con sala brava y otra con mayonesa. También se puede poner tabasco si alguien prefiera más picantes.
- Ya podeis disfrutar de esta delicia. Es plato perfecto como entrante o como guarnición de una carne o un pescado.